Marco Taboada, nutricionista de EsSalud, recuerda que las personas mayores suelen padecer enfermedades crónicas como la diabetes, hipertensión u otros problemas, por lo que la alimentación es clave para el control y tratamiento de su patología.
Así, la cena de Navidad podría afectarlos, de ahí que recomienda seguir ciertas pautas nutricionales para cuidar el estómago de los adultos mayores y no alterar su ritmo intestinal. Por ejemplo, llevar una alimentación variada, apetecible y muy nutritiva; así como fraccionar la ingesta en cuatro o más comidas en el día (desayuno, media mañana, comida, merienda y cena).
Los alimentos se deben preparar y cocinar adaptándose a las condiciones de masticación de los adultos mayores, el sexo, y estado de salud.
«Es muy importante mantenerlos hidratados durante todo el día, aunque no se tenga sed. Como mínimo hay que tomar ocho vasos de agua al día o líquidos como caldos sin grasa o de verduras o zumos naturales. Evitar las infusiones», dijo.
El especialista también aconsejó moderar el consumo de sal y azúcar en los platos y postres.